
Esta reflexión surge de un hecho que presencié mientras veía en ATRESMEDIA TELEVISIÓN cómo se distorsionaba la información alrededor de las elecciones en Estados Unidos. Me llamó especialmente la atención ver a Vicente Vallés y Sandra Golpe leer del teleprompter, sin vacilar, información que ellos mismos deben saber que es incorrecta. Un ejemplo claro es…
